CEBRA

La palabra "cebra" (proveniente de zevra, una palabra galaicoportuguesa que significa “asno salvaje”) realmente agrupa de forma artificial tres especies en función de un carácter primitivo (la piel rayada): Grevy, Etosha y Hartmann.

El nombre zevra deriva del nombre del "zebro" o "encebro" una especie de asno o caballo salvaje, que habitó la Península Ibérica durante la Edad Media. Cuando los portugueses empezaron a explorar el litoral africano (finales del siglo XV), encontraron unos equinos rayados que, les resultaron similares a las hembras de los zebros, por lo cual les dieron el nombre de zevras.

Las cebras son uno de los animales más conocidos en África, donde habitan muchas variedades de ecosistemas (sabanas, regiones boscosas, montañas…). Las cebras suelen vivir en la mitad sur del continente africano excepto algunas poblaciones de cebra común que habitan en el centro de Kenia. Son especialmente conocidos por sus características rayas negras y blancas (que no sólo varían entre especies sino también de un individuo al otro). Y aunque dos especies diferentes de cebras puedan vivir en una misma región no se cruzan debido al diferente número de cromosomas.

Una de las características de las cebras es su crinera de pelos erectos, porque aunque las rayas negras y blancas sean muy características de las cebras existen algunas subespecies que no las presentan.

Las cebras suelen tener un tamaño medio de 2,3 metros de longitud, de 1,2-1,5 metros de alto y un peso entre 300 y 450 kilogramos. Las cebras tienen un total de 40 dientes (12 incisivos, 12 premolares, 12 molares y 4 caninos) que utilizan para cortar y moler el alimento.

Tienen una excelente vista (se cree que pueden ver en color además de tener visión nocturna) y también tienen un buen oído (tienden a tener orejas grandes que pueden girar casi en cualquier dirección). Además de una buena vista y oído, las cebras tienen un agudo sentido del gusto y un sentido del olfato muy sensible al humo (esencial para sobrevivir a los incendios). La esperanza de vida en un medio natural oscila sobre los 12 años, sin embargo en cautividad esta puede aumentar hasta los 40 años.

Las cebras son animales negros con rayas blancas, y con una gran mancha blanca en el vientre que sirve para camuflarse. Y existen tres razones que lo demuestran:

1. Los équidos blancos no podrían sobrevivir en las llanuras y bosques de África.
2. Una subespecie de la cebra común, tiene las típicas rayas en la parte anterior del cuerpo, pero una parte posterior oscura.
3. Cuando la región entre las rayas pigmentadas pasa a ser demasiado ancha, aparecen rayas secundarias. Las rayas suelen ser verticales en la cabeza, cuello, paletillas y tronco, y horizontales por detrás y en las patas del animal.

Es un mecanismo de camuflaje, las rayas verticales contribuyen a esconder la cebra entre las hierbas. A pesar de que esto puede parecer absurdo a primera vista (teniendo en cuenta que la hierba no es ni blanca ni negra) es muy efectivo debido a que los leones (su principal depredador) son daltónicos.

Se cree que las rayas desempeñan un papel en el comportamiento sexual y social: ligeras variaciones de los patrones permiten que las cebras distingan a los diferentes individuos. En raras ocasiones, nacen cebras sin rayas, y estos ejemplares tienden a quedar separados del grupo.

Las cebras son mamíferos exclusivamente herbívoros que comen sobre todo por la mañana y por la tarde. Son animales que se alimentan de hierba tosca, hojas y brotes. Las condiciones secas de los ecosistemas en que habitan las cebras hacen que se hayan adaptado a los periodos de aridez. Las cebras mejor adaptadas han aprendido a excavar con sus pezuñas en busca de agua, otras en cambio, beben agua de lluvia, nieve o incluso rocío. Durante el día, las cebras duermen de pie, como los caballos, y sólo duermen cuando tienen otros animales alrededor que las avisen de la presencia de predadores. De noche, en cambio, a menudo se tumban en tierra.

Los predadores principales de las cebras son los leones, las hienas manchadas y los cocodrilos. Los leones y las cebras mantienen sus poblaciones en equilibrio, pues los leones matan antes a las cebras viejas o enfermas que a las sanas y fuertes.

Finalmente decir que la jerarquía del grupo se refleja en el orden en que andan sus miembros; delante de todo, anda la yegua más vieja con sus potros, después vienen las otras hembras en orden de edad, también con sus potros, y el macho es el que cierra el grupo.